El mundo de los negocios suele ser muy dinámico, ya que la economía mundial se encuentra en constante cambio y el futuro siempre es incierto por naturaleza. En este contexto, la aparición de imprevistos y conflictos es una realidad cotidiana.

Ante ello, toda persona de negocios debería poder reconocer posibles situaciones de crisis en su empresa y saber enfrentarlas. Es por eso que a continuación, de la mano del especialista Javier Ibañez, detallamos algunas estrategias para gestionar negocios en tiempos difíciles:

Identificar debilidades
Pareciera sencillo pero reconocer dónde está el problema es, de hecho, el paso más complejo. En el momento en que las cosas no marchan como uno espera, la respuesta habitual es desesperar y negativizar la totalidad del panorama. Esta posición no ayudará en absoluto, sino que será perjudicial para el proceso de búsqueda de las fallas del negocio. Es por ello que recomendamos no descartar la totalidad del negocio o producto, sino dedicar el tiempo necesario para identificar en qué área específica se ubica la dificultad.

No olvidar las fortalezas
Una vez que tengamos una aproximación a los eslabones que representan las debilidades del negocio, será necesario recuperar aquellas fortalezas que permitan sobreponerse a la crisis. Fueron las buenas ideas las que posibilitaron el surgimiento del negocio y serán ellas también las que puedan rescatarlo en tiempos de dificultades. Nunca está de más reforzar áreas que reportan buenos resultados y se mantienen en movimiento mientras otras experimentan detenciones.

Generar cambios para obtener nuevos resultados
Como mencionamos anteriormente, el mundo empresarial es siempre cambiante y es por eso que un negocio que permanece estático puede estar condenado a desaparecer. Ante situaciones de dificultad, se presenta una oportunidad para innovar y evaluar cambios tanto en los productos como en las estrategias de comercialización. Toda crisis debe posibilitar la búsqueda de actualizaciones y la renovación de técnicas o equipamientos.

Priorizar el trabajo en equipo
Rodearse del equipo adecuado es otra de las aristas esenciales a la hora de hacer un negocio, no sólo por la calidad del producto a ofrecer y el correspondiente proceso de producción, sino también por el clima favorable de trabajo. Considerar profesionales idóneos para las distintas áreas de desarrollo es la clave para optimizar el tiempo y los costos. De esta manera, disminuyen los errores y, por lo tanto, las pérdidas. En situaciones en las que nos vemos obligados a innovar o repensar la idea del negocio inicial, el asesoramiento de especialistas puede ser de gran ayuda para potenciar las fortalezas del negocio y sobreponerse a las dificultades.

Actualmente, estar en crisis es una realidad cada vez más frecuente. Lejos desalentar, debe ser observada como una invitación a repensar la idea que llevó al surgimiento del negocio. Lo ideal será considerar las fortalezas de la estructura y darle nuevos destinos, acompañado de personas dispuestas a trabajar para reinventarse. Esperamos que estas sugerencias sean alentadoras al momento de observar dificultades y dar el paso hacia la superación.

FUENTE: Redacción GM